La decisión tomada por los presidentes provinciales de la última MAP de votar en contra a la subida del premio a principios de octubre sigue trayendo cola.
Ya son varias las asociaciones que han recibido cartas de algunos asociados pidiendo explicaciones sobre la motivación que les llevó a votar en contra en un asunto tan crucial para el futuro del sector sin haberlo consultado antes a los asociados. Las explicaciones han sido siempre las mismas, la línea del miedo marcada por La Unión desde Madrid y parece que no todo el mundo está de acuerdo.
Pues bien, parece que, como mínimo, en Asturias no ha funcionado. Hoy nos hacemos eco de las cartas cruzadas con el presidente en funciones (el presidente falleció por desgracia de todos y aún no se han convocado elecciones) de la AEPA y algunos de sus asociados. No vamos a entrar desde este medio a valorar quién tiene razón, no es nuestra misión, pero si queremos dejar claro que siempre estaremos del lado de la transparencia, de la voluntad de la mayoría y en contra de políticas ocultas que dejan entrever carencias en un sistema que debería beneficiar a todo el colectivo y nunca lo parece.
Seguido podéis leer la respuesta a la carta que se envió por parte de un asociado.
Los estanqueros de Asturias señalan el camino correcto a seguir como asociados a una de las asociaciones pertenecientes a la Unión. El camino democrático y legalmente establecido. Pedir explicaciones a la Junta y si no son satisfactorias para ti, no votarles en las próximas elecciones o incluso diría más, presentarte tu con un proyecto y equipo distinto. Esa es la vía. Todo asociado puede votar y ser votado. Todas la Junta de las Uniones son legitimas, han sido legítimamente escogidas. La vía democrática tiene sus reglas. Poner verde a tu asociación en las redes puede ser bueno, incluso saludable, para desfogarse, pero no lleva a ningún sitio. O peor, nos lleva a donde estamos. cada vez menos gente asociada, supone que las asociaciones sean cada vez menos representativas.